MÉXICO, D.F.-Era el tercero al mando en el cártel de Juárez, estaba en la lista de los 20 criminales más buscados del país, su “cabeza” tenía un precio de 15 millones de pesos, pero fue detenido en una modestísima casa ubicada en una zona popular de Chihuahua, Chihuahua.
A José Antonio Acosta Hernández, identificado por las autoridades como “El Diego”, y jefe de sicarios en las plazas de Chihuahua y Ciudad Juárez de “La Línea”, lo capturaron las fuerzas federales en una vivienda ubicada en la colonia Arboledas.
Mientras otros capos de diversas organizaciones criminales han sido capturados o abatidos en lujosas residencias, “El Diego” se refugiaba en una casa de renta, por la que, según sus vecinos, pagaba 2 mil 500 pesos mensuales.
Este domingo, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) presentó a Acosta Hernández, a quien se le atribuyen los asesinatos de al menos mil 500 personas, entre ellas, tres empleados del consulado de Estados Unidos en Ciudad Juárez, en marzo del 2010.
En las instalaciones del Centro de Mando de Iztapalapa de la Policía Federal (PF) fue presentado el inculpado, quien fue detenido el viernes 29 de julio como resultado de intercambio de información con la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA), informó Ramón Eduardo Pequeño García, jefe de la división antidrogas de la PF.
- Las víctimas El funcionario dijo que Acosta Hernández aceptó que “ordenó el homicidio de aproximadamente mil 500 personas, principalmente en Ciudad Juárez y Chihuahua capital, entre los que se encuentran policías de los tres niveles de gobierno, funcionarios e integrantes de grupos rivales e integrantes de su propia organización a quienes les perdía la confianza y otros más no vinculados a grupos criminales a quienes privaba de la vida por equivocación al pensar que se trataba de integrantes del cártel del Pacífico”.
Sobre el homicidio de policías municipales en 2008, el funcionario dijo que el detenido “ordenó matarlos por negarse a colaborar con su organización, y a quienes acusaban de trabajar para la organización de Joaquín Guzmán Loera”.
Además, refirió, ordenó el homicidio de 14 personas el 30 de enero del 2010 en la colonia “Villas de Salvarcar” en Ciudad Juárez, así como la muerte de integrantes del grupo delictivo “Los Doble A” vinculados con el cártel del Pacífico que se encontraban en una fiesta.
También se le imputa haber coordinado y planeado el homicidio de 19 personas en el centro de rehabilitación “Fe y vida” en Chihuahua el 10 de junio del 2010 donde presuntamente se hallaban integrantes de grupos antagónicos, dijo Pequeño.
Además el asesinato de Sandra Ivonne Salas García, subprocuradora de asuntos internos de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Chihuahua el 30 de Junio del 2010, así como la autoría intelectual del ataque con explosivos en vehículos contra policías federales el 15 de Julio del 2010 en Ciudad Juárez.
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